El vergonzoso mercado laboral español

Dentro del mercado laboral voy a incluir el sistema educativo español, un sistema educativo que ni da cultura, vean los escandalosos libros de textos catalanes, ni siquiera prepara a los jóvenes para incorporarse al mercado laboral. Sobre esto último habría que decir que nuestra formación profesional ni es formación.
Rajoy y su equipo, con la ministra de Empleo a la cabeza, sacan pecho del crecimiento y la disminución del desempleo. Es tan vil y tan baja su postura que habría que recordarles que en Roma, gracias a un sistema de esclavitud, el desempleo no existía o era de unos números ridículos. Tan vergonzosa es la gestión realizada que desde la Unión Europea y otras instituciones les llevan sacando los colores desde hace tiempo. Al Ejecutivo de Rajoy, que dilapidó una mayoría absoluta incontestable para haber llevado a cabo una monumental actualización de España, ese líder de un partido (donde en el País Vasco y Cataluña les ha conducido a ser un partido con representación en las cámaras de menor apoyo) ha tenido una nueva ocurrencia.
Ante las más que fundadas críticas europeas, sobre la necesidad de que las brechas abiertas por la gravísima crisis se cierren, especialmente en los salarios, la UE reclama medidas para paliar el empobrecimiento de nuestra población. Pues bien ante esta tremenda y preocupante cuestión Rajoy ha decidido, una vez reunidos sus ministros, subir el salario mínimo interprofesional.
Desde luego si la decisión la hubiera tomado el próximo 28 de diciembre me hubiera parecido, como inocentada, muy buena casi perfecta. El problema del mercado laboral no se resuelve con decreto, con medidas legislativas, el partido de Génova sigue sin entender que en un libre mercado lo que hay que hacer es que demanda y oferta confluyan y se les garantice los mismos niveles de igualdad. ¿Cómo se termina con la precariedad sin acabar con las práctica indecentes existentes en nuestro mercado? ¿Le pueden preguntar a un autónomo qué es eso de subir el salario mínimo interprofesional por decreto? ¿Son los autónomos trabajadores o no?
Vamos a empezar con las distrofias usadas en nuestro mercado laboral. Una de ellas la tenemos muy reciente: la utilización del trabajo por cuenta ajena como autónomos, sí, son los "falsos autónomos". Está tan reciente la vergüenza de Deliveroo y similares, ya saben economía colaborativa, algo que como mínimo me causa sonrojo. La inspección de trabajo de Valencia ha puesto claramente blanco sobre negro, la relación de Deliveroo con sus repartidores es laboral y no un contrato mercantil. Señor Rajoy, ¿cuándo en el mercado laboral se hace esta utilización torticera de las relaciones laborales, cómo se cierra la brecha por Decreto Ley? ¿La subida del salario mínimo se aplica a los contratos entre empresas y autónomos? ¿Son los autónomos trabajadores o no, como dicen los ruines cargos políticos de Podemos?